Opinión: ¿Cree que el gobierno controlará realmente los servicios de atención de la salud bajo el plan “ObamaCare”?
Uno de los temas más polémicos de las elecciones presidenciales celebradas este año fue la Ley de Atención de la Salud Asequible, también llamada “ObamaCare”.
Aunque el plan “ObamaCare” es una ley que ya entró en vigor y muchos de sus componentes están siendo implementados, parece existir mucha confusión y malos entendidos al respecto; el gobernador Mitt Romney es uno de los principales causantes de esta confusión y desinformación.
En el primer debate presidencial celebrado el 3 de octubre, Romney señaló erróneamente que conforme al plan “ObamaCare”, el gobierno federal controlaría básicamente los tipos de tratamientos que las personas pueden o no recibir, ya que un panel de expertos sería responsable de tomar esta decisión.
Romney transmitió este mensaje durante toda su campaña lo que generó gran confusión en muchas personas sobre la naturaleza del plan “ObamaCare” y lo que espera lograr para nuestro sistema de atención de la salud.
El panel de expertos al que Romney se refirió se denomina Junta Asesora Independiente de Pagos, y a dicho panel se le prohibió expresamente recortar beneficios o reducir los servicios de la atención. En vez, el panel solo puede realizar sugerencias sobre la cantidad de recortes que puede hacer el gobierno en los pagos destinados a los proveedores de la atención de la salud. Un sinfín de instituciones verificadoras de datos y organizaciones de la atención de la salud intentaron reiteradamente corregir este mensaje, pero Romney mantuvo su postura en este tema.
En mayo de 2010, The Kaiser Family Foundation publicó un excelente artículo donde explicaba la estructura y el objetivo de dicha junta:
“La Junta estará constituida por 15 miembros a tiempo completo nombrados por el presidente y confirmados por el Senado, los que servirán durante un período de seis años. Se creará un consejo asesor para los consumidores, que constará de 10 miembros, con el objetivo de asesorar a la Junta. A la Junta se le prohíbe presentar propuestas que puedan reducir la atención, aumentar los impuestos, cambiar los beneficios o los derechos a Medicare, aumentar las primas a los beneficiarios y los requisitos en materia de la distribución de gastos.
Como observa la fundación Kaiser, esta junta solo podrá realizar recomendaciones acerca de las maneras en que el gobierno federal puede ahorrar dinero en los gastos pertinentes a la atención de la salud del programa Medicare.
Piense en el futuro de la atención de la salud cuando emita su voto.
Al acercase el Día de las Elecciones en nuestro país, es importante que el público entienda lo que está en juego para el sistema de atención de la salud, y más importante todavía, tenga conciencia del impacto que su voto tendrá para usted y su comunidad.
Nuestro sistema de atención de la salud actual es ineficiente y millones de estadounidenses no tienen acceso a dicha atención. Por primera vez en nuestra historia tenemos una ley que aumentará el acceso a la atención de la salud para millones de estadounidenses que más la necesitan, y esta ley brindará muchos beneficios a comunidades como Boyle Heights.
El plan “ObamaCare” no es una ley perfecta, pero Romney no explicó cuál sería su solución para el sistema de atención de la salud. De hecho, Romney promete comenzar el proceso de revocación del plan “ObamaCare” el primer día que asuma la presidencia. Incluso y a pesar de que presentó un plan estatal semejante como gobernador de Massachusetts.
Revocar el plan “ObamaCare” dejaría a millones de estadounidenses y a una gran cantidad de residentes de Boyle Heights sin acceso confiable y asequible a la atención de la salud, lo que aumentaría todavía más los crecientes costos de la salud en los Estados Unidos.
Los modelos implementados en otros países señalan que esta reforma vale la pena.
Una reforma legislativa como esta puede transformar un país. Por ejemplo, Taiwán implementó en 1995 un plan de cuidado de la salud universal y pasó de tener el 45% de su población sin seguro médico a cubrir el 95% de los habitantes en el primer año, según William Hsiao, profesor de economía de la Facultad de Salud Pública de Harvard y asesor del gobierno taiwanés en aquel momento.
En 1996, el sistema de salud de Suiza comenzó a exigir que todas las personas adquieran una póliza de seguro médico. Dicho sistema ofrece subsidios para las personas de bajos recursos y evita que las aseguradoras rechacen individuos por afecciones pre-existentes – todo esto también está contemplado en el plan “ObamaCare”. No hay motivos para creer que el plan “ObamaCare” no funcionará. Tenemos los recursos y el capital intelectual para hacer que nuestro sistema de atención de la salud sea más eficaz y eficiente.
Debemos sanear nuestro sistema de atención de la salud. El futuro de este sistema depende de quién votemos mañana en las elecciones. Ya hemos dado un gran paso con el plan “ObamaCare”, ahora solo podemos aspirar a continuar implementándolo.
Víctor M. Peña nació y creció en Boyle Heights donde reside. Cuenta con más de ocho años de experiencia en la atención de la salud y ha trabajado en organizaciones de este sector en los condados Santa Bárbara y Los Angeles. Obtuvo una maestría en administración de empresas, con una especialidad en gestión, y es el encargado de un departamento de Good Samaritan Hospital ubicado en el centro de Los Angeles.