Foto de Flickr Serge Melki/ Creative Commons
Foto de Flickr Serge Melki/ Creative Commons

Hacía un tarde fría y ventosa en diciembre del año pasado, cuando recibí excelentes noticias. El invierno había llegado junto con un gran sobre en el buzón del correo. Al tomarlo del buzón, vi que era de la Oficina de Admisiones de la Universidad del Estado en San Francisco. El corazón me comenzó a latir a toda velocidad, ya que en general, los sobres grandes enviados por la oficina de admisiones de una universidad significan buenas noticias.

Dudé un minuto pensando que quizás no debería abrirlo en ese momento, pero no podía detenerme. Lo abrí rápidamente, imaginando que adentro encontraría el boleto ganador. Leí la carta rápidamente y mis ojos quedaron fijos en las siguientes palabras “ ¡Felicitaciones!” y “Bienvenido a la generación 2012”. Salté de alegría y corrí a mi casa dando gritos de alegría. De inmediato supe que tenía que hacer unas llamadas telefónicas, y por supuesto, publicarlo en Facebook. La primera persona a la que llamé fue a mi hijo. “ ¿Sabes algo, m’hijo?  ¡Me aceptaron en la universidad!”
Cuando mi hijo fue aceptado en la universidad, sentí que a mí también me habían aceptado. Fue un momento muy especial de la maternidad que disfruté mucho. Era la validación del esfuerzo con sangre, sudor y lágrimas hecho a lo largo de los años.

Fui una madre soltera joven y crié a dos hijos varones sola. Pero todo el tiempo que invertí en mis hijos ahora está dando sus frutos. Recuerdo cuando asistía a las entrevistas escolares para padres y a las noches de regreso a clases, cuando me apresuraba a llegar a casa del trabajo para llevar a mis hijos a las clases de apoyo y a los eventos deportivos, cuando leíamos cuentos juntos en la cama, y todos los demás momentos simples de la vida cotidiana con niños en edad escolar. Sentía que estábamos logrando demostrar algo bueno, contra todo pronóstico.

Si bien mis hijos se criaron viendo que su madre iba a la escuela, trabajaba, se quedaba hasta tarde estudiando, y me acompañaron y dieron ánimo en mi graduación de Berkeley y de UCLA, no todos los padres tienen la información que yo pude brindar.

Mi hijo Quetzal y yo en la Universidad de California, Berkeley.

El paso a la universidad no es algo fácil para los estudiantes ni para los padres. En nuestra comunidad de Boyle Heights, los padres trabajan muchas horas para salir adelante y muchos son inmigrantes o hablan poco inglés. Sin embargo, he visto a padres muy fuertes y tenaces que son buenos defensores de sus hijos. Quizás no comprendan cómo funciona el sistema escolar, pero reconocen que tienen derecho a hacer preguntas y encontrar maestros, consejeros y administradores dispuestos a ayudar.

Sin importar si los padres tienen o no una educación universitaria, los padres somos el ejemplo más importante para nuestros hijos. Podemos ayudar a los jóvenes a aprovechar las oportunidades a su alcance al identificar los recursos disponibles. La clave es no darse por vencidos.

Lo mejor que podemos hacer como padres es siempre animar a nuestros hijos con una palabra afectuosa que les haga sentirse motivados. Debemos demostrarles a nuestros hijos que creemos en ellos al preguntarles sobre sus esperanzas, sueños y metas. Tenemos que animarlos a que busquen oportunidades en sus escuelas y les pregunten a los compañeros, maestros o al personal escolar y presten atención a los folletos, carteles, volantes, láminas y anuncios. Si no prestamos atención, podemos pasar junto a una oportunidad,  ¡y ni siquiera verla!

Para ayudar a los padres en esta transición, a continuación se presenta una lista de recursos en Internet que se ofrecen en inglés y en español. Les animo a sentarse con sus hijos y ver estos sitios juntos en la computadora de su hogar o visitar la biblioteca local para conectarse a Internet. Estén atentos a las próximas publicaciones que haré con consejos sobre ayuda financiera, becas, programas de preparación para la universidad y recursos para jóvenes indocumentados.
 

 
Luz Montavlo es residente de Boyle Heights y consejera universitaria de California State University, Los Angeles.

Luz Montalvo

Luz Montalvo is a Boyle Heights resident and college counselor at California State University, Los Angeles.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *